Reconozcamos que los cambios permanentes en el entorno global en plena era del conocimiento, la necesidad constante de mejorar la productividad en las empresas y la competitividad creciente local y globalmente, exigen que los profesionales con grados de bachiller o títulos mantengan su vigencia, formándose y capacitándose para garantizar su empleabilidad y competitividad en el entorno laboral.